Las redes sociales se han convertido en destino diario de los usuarios de internet. Es por eso que las marcas no pueden quedarse fuera del ecosistema social y deben conectar con su consumidor en este nuevo canal de comunicación. Sin embargo, el trabajo de las marcas en las redes sociales no puede quedarse sólo en compartir contenidos dado que las redes sociales en general y Facebook en particular están modificando sus algoritmos para que las publicaciones de los contactos prevalezcan sobre las de las marcas.
Esto hace casi obligatorio para las marcas plantearse invertir para que sus contenidos sean vistos por sus seguidores, sobre todo cuando se trata de Facebook e Instagram. En el caso de Twitter y LinkedIn la publicidad también se hace básica cuando se quiere enviar un determinado mensaje a un determinado target. Este es el principal beneficio que tienen la publicidad en redes sociales, la capacidad de segmentación de la publicidad que tiene la marca. Pero esta no es la única ventaja que tiene publicitarse en redes sociales:
- Resultados con poca inversión. Las redes sociales son uno de los canales online con el CPC más bajo, por lo que con poca inversión mensual se consiguen los objetivos marcados. Dichos objetivos pueden ser más enfocados a marca, como conseguir “Me Gustas” en las publicaciones, como directamente enfocados a la venta o a conseguir contactos.
- Gran alcance. Debido al bajo coste que requieren las redes sociales frente al resto de publicidad online, que hemos comentado antes, además de conseguir los resultados marcados, también conseguiremos un gran alcance de nuestra publicidad. Por ejemplo, en el caso de Facebook, invirtiendo únicamente cinco euros en una publicación, el alcance de este contenido se multiplica por diez.
- Los formatos son muy amplios. La publicidad tradicional tiene unos formatos preestablecidos que son muy limitados. Aunque en el caso de los formatos publicitarios en las redes sociales vienen determinados por cada uno de los canales, sí que existe un abanico más amplio para elegir el formato pudiendo publicitar imágenes, textos, links, vídeos e incluso gifts.
- Los resultados son medibles mediante informes. A diferencia de la publicidad convencional cuyos informes de resultados se basan en estimaciones, en la publicidad digital los informes son en base a los datos reales de la campaña.
- Las campañas pueden optimizarse. Debido a que los resultados de la campaña y el cumplimiento de los objetivos se pueden ver en tiempo real se pueden tomar decisiones para optimizar las campañas de redes sociales. Por ejemplo, podemos decidir sustituir determinados contenidos que no estén funcionando por otros. Lo que además nos permite realizar tests A/B para determinar cuál de las dos contenidos publicitarios ha funcionado mejor con nuestro target.
Las marcas cada día apuestan más por publicitar sus contenidos en redes sociales y no sólo por la capacidad de segmentación que presentan, sino porque el retorno de la inversión es mucho más elevado que en la publicidad tradicional.
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